Eso de las relaciones y las
historias de amor (desamor) son una cosa verdaderamente complicada; no se si uno cede a esos mensajes subliminales (y ni tan subliminales) que el mundo manda con todas esas historias -algunas realmente extrañas- de los
cuentos de hadas y de las miles de
películas rosas que siempre terminan en que
A va por
B o bien que
C decide dar un vuelco de 180° y quedarse con
D, que al final -muy secretamente y sin darnos cuenta- uno espera que las cosas en verdad resulten
mágicas en la vida real.
No creo que uno deba perder la esperanza de encontrar a alguien con el/la cual se
conecte, pero creo que las relaciones se construyen más en el sentido del ensayo-error; como bien escribe
Magenta, uno cree que es dueño/a de sus sentimientos y que va por el camino correcto hacia el amor, pero luego nos toca estar del otro lado de la ecuación y ouch! nos estrellamos contra la realidad de que las cosas no son nunca como uno cree pues siempre está la visión del otro. Y bueno, también está el otro extremo de como dice
Jo, que hay amores engañosos y que hay gente que finge muy bien y al final te roba tiempo, un pedazo de corazón y muchas horas de sueño.
Creo que todo sería mejor si uno aprendiera a estar
solo y a darse cuenta de lo que uno quiere, dejando de lado el
deber ser, si, ya se que eso es casi una utopía, pero no me parece imposible; requiere de un trabajo de introspección bastante profundo que desgasta, -si, para que negarlo- pero que al final puede que nos libre de más descalabros y corazones rotos que los estrictamente necesarios.
Es difícil andar solo en un mundo que le gusta
en-parejarlo todo, pero nada me parece más hipócrita que eso en una era donde el divorcio y la infidelidad es casi una moda. Muchos/as caen en ese juego y terminan dentro de una
miserable costumbre que realmente los hace miserables...(y.. ¿vale la pena?...)
Dicen por ahí que
mejor solo que mal acompañado, pues al final uno es el que
paga los platos rotos, la vida es muy corta como para perderla en tarugadas y sinsentidos (digo yo); está bien luchar por lo que uno quiere, está bien guardar la esperanza de encontrar a la persona indicada (sea lo que sea que eso signifique para cada uno), está bien equivocarse en nombre del amor (de vez en cuando, no más), está bien siempre y cuando eso que llamamos amor no nos haga sentir
... encadenados, pesados... tristes o atrapados....
.p.h.o.t.o_.b.y._:
Suradej Chuephanich |